El durísimo comienzo de año de Boca
- leonardosalta
- 28 ene 2016
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Boca se quedó con la Copa Argentina y con el Torneo de los 30 equipos en el último suspiro del 2015 que tenía agendada la redonda. Tenía planeado un 2016 a todo trapodonde el gran objetivo es volver a ganar la Copa Libertadores de América. Salió al mercado de pases con una billetera bien gordita pensando en armar un verdadero Dream Team. Pero en lo que va de este verano ya recibió tres duros cachetazos.
En el primer acto, Boca cayó frente a Racing por 4 a 2, luego vino la segunda puesta en escena: durísima derrota en el Superclásico ante River por 1 a 0, y ayer en la tercera presentación en sociedad, el equipo de Rodolfo Arruabarrena demostró otra labor para el olvido con una derrota por 2 a 0 contra Estudiantes de La Plata.
El Xeneize trajo cinco refuerzos de jerarquía: Jonathan Silva, Leonardo Jara, Daniel Osvaldo, Juan Manuel Insaurralde y el colombiano Frank Fabra. Y podría hablarse de seis si se toma en cuenta el retorno de Federico Carrizo, que volvió desde Cruz Azul de México. Pero al parecer las caras nuevas no brindaron soluciones.
Aunque es cierto que solo ante River actuaron los que el Vasco tiene en mente para darles un papel protagónico, esos que sumarán minutos al por mayor una vez que se ponga en marcha la competencia oficial, el nivel de juego es pobre y hasta se podría decir que es casi nulo.
Ayer frente al Pincha tras un arranque con algunos chispazos de Pachi Carrizo (tuvo dos chances para convertir, una con un cabezazo que motivó una gran tapada de Mariano Andújar), el equipo se derrumbó ante la primera contrariedad, que fue justamente el tanto que rompió el cero, el de Gastón Fernández a los 37 minutos de la primera parte.
Andrés Cubas trabó mal una pelota en el medio, desacopló la defensa, Augusto Solari manejó bien la contra, Carlos Auzqui envió un centro atrás preciso y la Gata aprovechó la promo que ofrece el equipo de la Ribera por estos días y la canjeó por gol.
Para colmo, en el arranque del segundo tiempo, tras una cadena de bloopers entre Lisandro Magallán y Nicolás Colazó, Elías Umeres empujó la pelota a la red para determinar el final del partido, en apenas dos minutos del complemento ya que todo lo que vino después fue una sucesión de cambios y el transcurrir anodino de las vueltas de reloj, donde Boca se exhibió desvaído, ya que ni ataca ni juega ni defiende bien, juegue quien juegue, una preocupación para Arruabarrena, que no encuentra respuestas futbolísticas en sus dirigidos.
Encima la de ayer fue una de las peores actuaciones de toda la historia del Xeneize en los torneos de verano. El Vasco tiene mucho trabajo por delante si desea dar batalla en todos los frentes a los que el equipo de la Ribera pondrá fichas en juego. El durísimo comienzo de año de Boca.

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